domingo, 3 de junio de 2012

¿El retorno del Tahuantinsuyo?

Los incas, quienes en realidad crearon un imperio en 90 años y después se desplomó por la conquista española, decidieron -según recientes investigaciones- ocupar la parte norte del actual Ecuador, por sus condiciones astronómicas de la Mitad del Mundo, para reverenciar a su deidad, el Sol. Esto produjo un enfrentamiento contra la confederación cayambe-otavalo-caranqui, quienes se unieron durante más de una década para evitar la formación del Tahuantinsuyo.
La investigación de José Echeverría Almeida señala: Según el cronista Juan de Betanzos, durante la incursión inca (1475-1532), uno de los encuentros bélicos decisivos para el afianzamiento del poderío inca fue la hecatombe de Yahuarcocha. Destruidas las fortalezas de Aloburo y Yuracruz, el ejército multiétnico de la Sierra Norte seleccionó como lugar estratégico de batalla las orillas de la laguna, por la ventaja de poder camuflarse entre los totorales y enormes sauces del lugar.
De acuerdo al cronista Murúa (1616), Huayna Cápac ordenó que 40.000 guerreros del ejército imperial rodearan la laguna y que 30.000 soldados arremetieran contra los soldados nativos parapetados en las lomas. Entre ruidos de tambores, flautas y churos (pututos) se enfrentaron los dos ejércitos causando una mortandad exorbitante en los dos bandos, tanto que las aguas se tiñeron de sangre. De ahí viene, pues, el nombre de Yahuarcocha, para esta laguna, conocida anteriormente como Cocha caranqui, según señala Waldemar Espinosa Soriano (1983).
En la investigación subacuática, refiere Echeverría, realizada en estos años en quince puntos, equivalente a 300 m2, esto es, el 0,01% de la totalidad del fondo lacustre, se encontraron vestigios culturales, tanto de cerámica como de restos óseos, lo que demostraría los hechos de la batalla de Yahuarcocha, donde los huérfanos caranquis serían llamados “huambracunas”.
Irónicamente, según otras fuentes, como Silvio Luis Haro, cuando el inca Atahualpa, nacido en territorio caranqui, enfrentó y derrotó a su hermano Huáscar, en Cusco, fueron los guerreros caranquis, a la sazón jóvenes, quienes participaron en el sometimiento de sus antiguos enemigos. Después, con la llegada de los conquistadores ibéricos y el asesinato de Atahualpa, tras hacerle pagar un cuantioso rescate en plata y oro, el imperio inca fue destruido.
Esto viene al caso, ahora que nos acercamos a la fiesta del Solsticio, Sanjuanes o Hatun Puncha (Día Grande) que algunos insisten en llamar Inti Raymi, como si el Tahuantinsuyo estuviera a la vuelta de la esquina. Por lo demás, el culto solar no fue privativo del incario.



No hay comentarios:

Publicar un comentario